PECADO 1
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Formarse profesionalmente de espaldas al Mercado laboral
Este
es el más grave. Constituye un error estructural y reparar
esta situación implica un esfuerzo considerable, que será
proporcional al grado de desvío que se registre entre la
formación adquirida y las posibilidades de aplicación
práctica.
Cuando se toma la decisión de encarar una formación
profesional, se lo hace pensando en que, una vez cumplido el tiempo
de estudio, se aplicarán esos saberes de un modo u otro.
En el momento de la elección se trata de no "frustrar"
la inquietud por conocer más en un determinado campo o
por adquirir determinada habilidad. Es el momento de "escuchar"
el llamado íntimo de la vocación, estudiar, por
ejemplo, Arqueología. Antes de tomar la determinación,
debe ponerse sobre el tapete si se está dispuesto, y hasta
que punto, a pagar el costo de esta decisión.
Por un lado, no llevar adelante la idea podría implicar
quedarse con una "asignatura pendiente", pero por otro
cabe preguntarse, si hoy el horizonte profesional no aparece claro,
¿las cosas serán diferentes dentro de cinco años?
Transcurrido el período de estudio - después de
invertir tiempo, sacrificios, dinero, ilusiones, expectativas
propias y familiares - es posible encontrarse con un montón
de conocimientos que no se pueden poner en práctica, a
lo cual habrá de sumarse la necesidad de satisfacer aspectos
económicos que, de no lograrse, significará un problema
más: no realizarse como persona independiente y autosuficiente.
En este punto ¿está seguro de que no va a sentir
la misma frustración que antes quiso evitar? ¿Está
seguro de que no va a tener la sensación de estar en el
mismo punto de partida... pero con cinco años más?
De todos modos el problema no puede eludirse. Sin capacitación
profesional son pocos los caminos que se pueden transitar. ¿Cuál
es entonces la salida? No hay un camino trazado. Como dice Machado
"se hace camino al andar". La opción más
sencilla (y cómoda) sería buscar una capacitación
que asegurase de antemano una salida laboral. Pareciera el camino
más corto, pero debe tenerse en cuenta que le espera una
vida de capacitación y desarrollo sobre un campo que no
despierta un interés especial y que, a la hora de emplearse,
su futuro empleador se percatará de su falta de motivación
para el desempeño de las funciones. Y esto no es fácil
de disimular, pudiendo significar un costo emocional indeseable.
Otro camino aparentemente más complejo y laborioso,
pero más fructífero, puede ser buscar las formas
de conciliar la vocación y el mercado, intentando hallar
puntos de encuentro entre los deseos e inquietudes personales
y las oportunidades laborales. Significa un esfuerzo inicial,
requiriendo principalmente información sobre carreras y
sus campos de aplicación profesional (concretos y reales,
y no meras exposiciones retóricas) como también
conocer las distintas áreas y tareas que se cumplen
en el ámbito laboral. Es de interés estudiar
también la posibilidad de cruces interdisciplinarios
que hagan factible un proyecto de vida satisfactorio.
PECADO
2 ___________________________________
No tener un plan de carrera articulado
La planificación
de carrera no empieza y culmina en la capacitación técnica.
Planificar implica desde la elección de materias optativas
o determinada orientación de especialización durante
la etapa de estudio, hasta realizar un trabajo ad honorem. Significa
trabajar y estudiar en función de un objetivo claro,
que se irá articulando, mediante giros en cambios incrementales
a medida que se crezca laboralmente.
Es trazar un plan de acción que se extienda durante toda
la trayectoria profesional. Es diseñar el conjunto de acciones
que estarán focalizadas en la construcción de un
perfil profesional, coherente con las aptitudes y capacidades
individuales. Es delinear realizando las correcciones debidas,
en concordancia con la información de retroalimentación
que nos envía el mercado.
PECADO
3 ___________________________________
No hacer un análisis f.o.d.a. de sí mismo (fortalezas,
oportunidades, debilidades y amenazas)
El propio postulante
es el primero que debe conocer quién es, para qué
sirve, qué sabe, qué puede, qué quiere, en
qué contexto laboral encaja, en qué se destaca.
Este análisis no puede quedar en manos de otro. Y si no
lo sabe no podrá destacar esos aspectos.
Deberá conocer cuáles son sus puntos débiles,
y de éstos, deberá distinguir los modificables de
los inmodificables. En el primer grupo están aquéllos
sobre los que puede actuar; por ejemplo, reforzar una experiencia
incipiente con una práctica no rentada. Dentro del otro
grupo se colocan aquellos factores que no dependen de uno, por
ejemplo, exceder la edad estaría dentro de lo no modificable
-el calendario no retrocede -. La solución puede pasar
por compensarlo con argumentos como mayor experiencia, madurez
en las decisiones, o buscar una organización que tenga
otras prioridades, que no pasen por la edad de sus colaboradores.
El análisis conduce a que cada persona se considere
a sí misma como un "todo" (aptitudes, antecedentes,
experiencias, motivaciones) y se relacione con las necesidades
y demandas del mercado. Sin esta condición, no es posible
focalizar las áreas a las que debe orientar la búsqueda
de empleo. Es imposible no vincular las Fortalezas, Oportunidades,
Debilidades y Amenazas con lo que está demandando el entorno.
Asimismo, el resultado de aquel análisis permitirá
detectar posibles "nichos" de mercado.
PECADO
4 ___________________________________
No armar su propio programa de capacitación continua
Los profesionales, independientemente
de la disciplina que abracen, pueden dividirse en dos grandes
grupos:
a. Profesionales que lo son porque siguieron una
carrera universitaria o terciaria.
b. Profesionales que siguieron una carrera y "siguen
en carrera".
Para los primeros, su objetivo central fue obtener un título
y empezar a ganar dinero, pero los tiempos actuales les anuncian
momentos difíciles. El vertiginoso crecimiento científico
y la globalización originan la necesidad de mantenerse
actualizados metodológica y tecnológicamente. Si
no lo hacen, con el correr de los años el título
obtenido irá perdiendo validez y el esfuerzo inicial no
será tan redituable.
El grupo de los que "siguen en carrera" tendrá
mayores posibilidades de éxito. El concepto de capacitación
continua es algo más que una acción circunstancial;
es un estilo de vida. Es el estilo de quienes entienden que,
mientras dure su vida laboral, deberán dedicar parte de
su tiempo a incorporar nuevos conocimientos o actualizar los adquiridos.
PECADO
5 ___________________________________
No cuidar los aspectos formales y conceptuales de sus presentaciones
Tan simple y sin embargo
es el punto donde con más frecuencia se encuentran fallas.
Significa desconocer cómo presentar los datos que se requieren
en un Curriculum Vitae. Por ejemplo, sobreabundar en detalles
irrelevantes, dar por sentado que con mencionar el cargo ya basta,
pensando que no es necesario describir el alcance de las funciones,
cometer errores de ortografía y ser confuso en la información.
Significa, relativizar la importancia del rol que cumple el Curriculum
Vitae dentro del proceso de selección. Es descreer que
la mejor argumentación pasa por una coherente carta de
presentación. Es no ser honestos en los datos o "maquillarlos",
intentando acceder al puesto con méritos que no se poseen.
Durante la entrevista, descuidar detalles, como llegar tarde o
no mostrar sobriedad en el vestir, los gestos o el tono de voz.
Esta es una mínima enumeración de los mil y un detalles
que deben cuidarse tanto en lo formal como en los aspectos de
fondo. Detalles que si no se cuidan pueden crear inconvenientes
y que, si se está atento a ellos, pueden facilitar el proceso
de selección e inclinar la balanza a su favor.
PECADO
6 ___________________________________
No hacer una búsqueda activa de trabajo
Creer que las ofertas
laborales son exclusivamente las que se publican es
un acto de inocencia inaceptable en un buscador de empleo profesionalizado.
Obtener un trabajo acorde a las capacidades es una tarea en la
que se cumple un papel activo. Nadie puede reemplazar al interesado
en ese papel ni en ninguno de sus aspectos. Se necesita dedicación
casi full-time para resolver positivamente la necesidad laboral.
Hay más de un camino a seguir y cada cual debe construir
su propia estrategia de acuerdo con las circunstancias particulares.
PECADO
7 ___________________________________
Pretender deslumbrar a su entrevistador o disminuirse ante él
Dentro del proceso
de selección una instancia capital es la entrevista. El
postulante se juega aquí una carta definitiva, dependiendo
su ingreso a la empresa de cómo se desempeñe en
esos pocos minutos.
El "pecado" puede consistir en asumir una de dos conductas
que son diametralmente opuestas y ambas absolutamente desaconsejables.
Esto es tratar de impresionar a su entrevistador con una actitud
"ganadora" pero inconsistente o, por el contrario, tomar
una actitud pasiva, mostrándose inseguro de las propias
condiciones. Son como dos caras de una moneda falsa.
Por ejemplo, generar un clima artificial, todo marcha bien, se
es "un triunfador" y no tiene inconvenientes para conseguir
un buen puesto, "su anterior trabajo era estupendo y bien
remunerado", "no tuvo ningún contratiempo",
"el clima era ideal y se llevaba bien con todos", "sus
logros fueron innumerables", "si bien se fue, puede
volver a trabajar allí cuando lo desee..." ¿Ud.
está buscando trabajo?
Otro ejemplo de lo que no se puede hacer, es intentar llevar el
comando de la entrevista, no dejando hablar a su interlocutor
y escuchándose sólo a sí mismo. Esgrimir
como "ventaja competitiva" argumentos que, mal usados,
están a la altura del lugar común. (Pienso en aquéllos
que emplean términos como "calidad total" o "reingeniería",
como si fueran etiquetas de frascos vacíos de contenido,
que no entienden que son conceptos complejos y profundos que requieren
un acabado conocimiento, y que es preferible no usarlos si esa
condición no se cumple).
La otra cara de la moneda está representada por quienes
se paralizan ante el encuentro cara a cara y no atinan a dar valor
a sus antecedentes presentándolos de la mejor manera. Esto
sucede cuando no se ha hecho previamente el debido análisis
de aptitudes, habilidades y competencias. Por ejemplo, subvaluar
sus potenciales de contribución, ignorar las reales ventajas
sobre otros postulantes y empequeñecer los antecedentes,
deteniéndose en describir funciones de poca importancia
y perder así la oportunidad de utilizar el momento crucial
de la entrevista para destacar otras funciones verdaderamente
importantes.
¿Un consejo? Vuelva a leer esta nota, lápiz en
mano, desde el primer pecado al último. Vale arrepentirse.
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